Análisis: Casi Normales (Next to Normal) con Tomás Caia

Casi Normales es uno de los musicales más exitosos que tuvo Argentina y Tomás Caia hace un análisis de su forma y estructura.

casi normales

Casi Normales es uno de los musicales más exitosos que tuvo Argentina. Tomás Caia hace un análisis de su forma y estructura.

Transcripción Análisis Casi Normales

¿Qué tiene Casi Normales o Next to normal para hacernos vivir casi todas las emociones? Hablemos con spoilers de uno de los mejores musicales hasta la fecha. No solo nos cuenta que Diana fue diagnosticada con trastorno de bipolaridad. Nos arrastra a experimentar el mundo como ella lo vive. Nos enteramos de una verdad desgarradora mientras su marido Dan se la recuerda, vemos al Dr. Madden transformado en rockero, seguimos a su hijo Gabriel a “Un lugar”… Estamos en alerta constante como pasa con las personas que rodean a cualquiera que atraviesa una patología.

Así, podemos entender lo difícil que es para Diana sentirse anestesiada, como nos explica en “Sin las montañas”: extraña Esa euforia al subir / y la angustia al bajar, sus cambios de humor repentinos antes de la medicación, pero que la hacían sentir algo, mientras que lo que su psiquiatra considera como “paciente estable” es que no sienta nada. El disparador de esa canción es el “fuego” que ella ve en su hija Natalie después de enterarse de su noviazgo. Porque la obra es un juego de espejos esquivos entre las dos hasta lograr la conexión desde lo casi normal.

Natalie

Natalie usa a Mozart como metáfora de algo calculado que oculta inestabilidad, quiere la fachada, una sonata que se deje escuchar. Siente que va a terminar como su mamá pero toma sus medicamentos para justamente anestesiarse de la realidad. Solo va a lograr canalizar su ansiedad cuando, luego de haber hablado con Henry, libere a Diana de la culpa de buscar una falsa construcción de normalidad. Diana solo va a lograr conectar con Natalie cuando verbalice que se ve en Natalie y le hable con honestidad sobre la muerte de Gabriel. La salida está en reconocer la herida, pese a los intentos de Dan por taparla.

Dan

Dan es casi normal también, con una angustia que reprime de forma impostada como muestran sus momentos musicales tan cambiantes. Ppor ejemplo, el optimismo artificial de “Está todo bien”, el cansancio de “Es loco” y el estoicismo de “Yo estoy”. Anula sus dudas. Las promesas que un “niño hace tiempo juró”, el hombre también las sostiene aunque haya olvidado las razones.

“La canción del olvido” es particular, porque al hablar lúcidamente de “canción” mientras cantan, los personajes toman distancia del mensaje y nos lo exhiben. El mismo estribillo quiere decir algo diferente para Dan (que Diana olvide datos es cierto triunfo), para Diana (que está frustrada) y para Natalie (que está enojada e incrédula y no puede sanar sin recordar, pese a que sus recuerdos estén llenos de dolor).

La Luz en Casi Normales

Dan se obsesiona con la idea de una “Luz en la oscuridad”, la que se usa para prender una lamparita en la terapia de electroshock. Pero para Diana esa luz es la que la sigue alejando de lo que es (como muestra la puesta que la desdobla) y de su camino.

La obra arranca con Diana prendiendo una luz. Cuando Diana se va de la casa, Dan se queda a oscuras, Diana representaba esa luz para él. Esa que se desvivía por mantener prendida. Entonces Natalie prende la luz, puede ser luz para su papá. Reconocer y nombrar es empezar el incierto camino de la sanación, como cuando Dan nombra a Gabriel por primera vez. Con caminos más separados, la familia armoniza hasta musicalmente de otra manera en “Luz”. En contraste con “Otro día más” donde la armonía remarca el “dolor”). Esas luces individuales dan una luz mayor, la que se nos comparte al final de la función.

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